Dra. Raquel Campos
Hipertrofia de labios y algo de historia
Los genitales femeninos han pasado de ser de los grandes desconocidos en la antigüedad, a los grandes explotados por el porno.
Curiosidades etimológicas:
La palabra vulva deriva del latín y significa abrigando o cubriendo. Y el nombre de clítoris proviene del griego y existen dos teorías de su significado, uno sería el de parte del cuerpo en forma de colina o elevación y el otro el de llave o elemento que cierra. Los genitales femeninos ha recibido muchos nombres, inicialmente más enfocados en su representación o función, hasta que no se hicieron las primeras descripciones anatómicas.
En el talmud judío el cuerpo femenino era considerado un almacén, y los labios mayores se denominaban las bisagras externas, los labios menores eran las bisagras o puertas internas y el clítoris era la llave del almacén.
Sorano definió los labios como las aletas y para Rufus de Efeso el vello pubiano y la vulva eran el peine y la grieta.
Se llama ‘separación’ (skhísma) el corte del sexo de la mujer. La parte musculosa de la zona central, ‘carnecilla’ (sarkíon), ‘capullo de crisálida’ (nýmphē) y ‘capullo de mirto’ (mýrtē). Otros lo llaman ‘pielecita’ (hypodermís), otros ‘clítoris’ (kleitorís). El tocarse esa parte sin recato lo llaman ‘acariciarse el clítoris’ (kleitoriázein).» (Rufo de Éfeso, De corporis humani appellationibus, 111)
Venus Willenford Llave griega
Leonardo da Vinci
Curiosidades anatómicas:
Para conocer algo de nuestros ancestros recurrimos al arte e interpretamos qué concepto podía tener dicha sociedad de muchos aspectos vitales. De esta manera, vemos que las primeras representaciones de mujeres en arte iban enfocadas tan solo a la reproducción, como nos muestra una de las piezas más antiguas, la estatuilla de la Venus de Willenford ( 30000-25000 aC).
El estudio de los genitales femeninos iban enfocado desde sus inicios a la reproducción y a las patologías, no tanto a la anatomía, y a menudo se correlacionaba con el hecho de ser un sistema complementario a los genitales masculinos. Las primeras descripciones anatómicas de los genitales fueron de Herófilo, pero no se conservan sus tratados anatómicos, seguidas de las de Galeno y Sorano de Efeso, en el siglo II dC, que describió el clítoris. Las primeras ilustraciones anatómicas de la vulva fueron de Leonardo da Vinci (1452-1519), y con Andres Vesalio (1514 – 1564), uno de los padres de la anatomía en su obra De Humani Corporis vemos las primeras buenas ilustraciones de los genitales femeninos, con un estilo anatómico sistemático y moderno, gracias a las disecciones anatómicas. Pero el clítoris tal y como lo conocemos hoy en día no se describe anatómicamente hasta 1998, cuando Helen O’Connell, uróloga, realizó estudios con resonancia magnética y confirmó la anatomía completa del clítoris, siendo mapeada en 3D en el 2009!! Es decir que hasta hace tan solo 19 años desconocíamos este pequeño, gran órgano cuya única función es el placer de la mujer.
Hipertrofia de labios y labioplastia:
Y anatómicamente hablando podemos decir que los labios menores, que cubren parcialmente el introito o entrada a la vagina, y que suelen estar cubiertos a su vez por los labios mayores, son muy diversos tanto en tamaño como en grosor como en morfología. Habitualmente no sobresalen de los labios mayores, pero algunas mujeres presentan unos labios que sobresalen o con una diferencia de tamaño entre ambos labios menores muy patente
Este hecho entra dentro de la variabilidad individual y no supone un problema para muchas mujeres a ningún nivel, por lo que no se debe intervenir en estos casos.
Pero desde hace unos años, la tendencia a la depilación genital ha aumentado y esto hace que la mujer vea más expuestos sus genitales, por lo que las diferencias y los cambios que pueden darse con los años se hacen más evidentes. Cuando existen unos labios hipertróficos, algunas mujeres manifiestan molestias para la actividad cotidiana ( ejercicio, relaciones, etc) En alguna ocasión la propia autoestima se puede ver afectada e incluso dar lugar a algún tipo de disfunción sexual secundaria que impide tener una vida sexual plena y satisfactoria.

La corrección de esta situación pasa por una cirugía mínima. Las técnicas son muy diversas e individuales según cada caso. Hay mujeres que pueden precisar tan solo una corrección de labios menores, otras precisan corregir el capuchón del clítoris o las duplicidades de labios que pueden tener, y algunas pueden mejorar también alguna técnica para relleno de labios mayores. Cada caso debe ser valorado individualmente para poder llevar a cabo la cirugía que pueda resultar más satisfactoria.
La cirugía puede llevarse a cabo con bisturí frío, electrobisturí o láser y se realiza con anestesia local, loco-regional con infiltración de pudendos y/o sedación . Son cirugías con pocas complicaciones intra y postoperatorias y se realizan de forma ambulatoria.
Los cuidados postoperatorios requieren evitar el ejercicio y la actividad sexual en 4 semanas aproximadamente, cuidados higiénicos de la zona antiinflamatorios y hielo los primeros días. Las suturas son reabsorbibles, por lo que en general no precisan de extracción posterior.
El grado de satisfacción del resultado es mayoritariamente muy bueno, pero es muy importante en la evaluación inicial conocer las expectativas de la paciente y poder ajustar al máximo las expectativas al resultado real final.